Proclama local por Día de la Mujer: seguridad fue un tema clave
La Plaza Zorrilla fue el lugar elegido para que las cientos de mujeres que marcharon este 8 de marzo dieran lectura, y escucharan, la proclama preparada por los colectivos feministas organizadores.
En la misma, uno de los temas a los que se hizo mención tiene que ver con la seguridad de las mujeres, con énfasis en el dato de que ocho femicidios ya se han cometido en lo que va de este 2022 en Uruguay, y que en el 2021 fueron 30, más 17 intentos:
“La pandemia ha dejado al descubierto una realidad que veníamos denunciando, pero que aún hoy se invisibiliza. Con todas las fuerzas del aparato opresor neoliberal. Estamos menos seguras en nuestros hogares de lo que nosotras mismas imaginábamos. La mayoría de los femicidios del 2021 se produjeron en las viviendas familiares y fueron ejecutados por la pareja actual de la víctima, el promedio de edad de las víctimas fue de 39 años y tanto en ellos como en los casos de violación el espectro de edades de los agresores ha sido amplio.
Dicha información contrarresta el énfasis que hace la cultura patriarcal en que la mayor desprotección es vivida por las mujeres jóvenes, durante la noche, en espacios públicos de disfrute, siendo víctimas de personas desconocidas; promoviendo el ejercicio de control sobre cómo vestimos y dónde, cuándo y con quién circulamos. Pero si no estamos seguras en nuestras casas ni en las calles, ¿Cuál sería nuestro lugar?
Hace unos días un escandaloso episodio de violación grupal sacudió nuestro ámbito social y resurgieron las miserias de muchos y muchas, colocando en el banquillo de los acusados a la víctima, cuestionando su libertad, analizando su vida personal, poniendo en tela de juicio la veracidad de su denuncia, exponiendo y dando un tratamiento repudiable a la noticia por parte de algún individuo que se hace llamar periodista. Después preguntan por qué no denunciamos o por qué demoramos tanto tiempo en decir que fuimos violentadas. Y como este hecho parece no ser suficiente, esta semana, dos mujeres jóvenes erradicaron una denuncia luego de haber sido violadas por dos policías que las trasladaban en móvil oficial. Este hecho demuestra el grado de vulneración de derechos que sufrimos incluso por parte de las instituciones que se supone, deben cuidarnos. Citando a Rita Segato, nuestro cuerpo debe dejar de ser considerado territorio de conquista”.
El texto hizo mención al contexto actual desde el punto de vista de la legislación: “todo ello en el marco de una ley de Violencia Basada en Género con un presupuesto insuficiente, una reorganización de recursos que restringe el acceso de las mujeres en situación de mayor vulneración a las sedes judiciales competentes y una reglamentación policial interna modificada que cuestiona a las organizaciones sociales y solicita a las mujeres que presenten pruebas al momento de efectuar las denuncias”.
Foto: Florencia Legarralde – Diario Primera Hora