Buscan a la mujer que generó grave accidente en Tour de France
El Tour de Francia presentó una denuncia contra la espectadora que provocó una dura caída durante la primera etapa de la presente edición el pasado sábado, cuando cayeron más de 20 competidores y se puso en riesgo la salud de más de 100 personas.
La misteriosa mujer, cuyo paradero aún no se determinó, mostraba a la cámara de televisión un cartel que decía “Allez opi-omi” (Vamos abuelo y abuela) a unos 45 kilómetros de la llegada en Landerneau y por su imprudencia derribó al alemán Toni Martin. Esa caída tuvo un efecto dominó y provocó una mucho más grande.
La Gendarmería de Finisterre, departamento por el que transcurrió la primera etapa, realizó un llamamiento para identificar a la espectadora, al tiempo que anunció la apertura de una investigación por heridas involuntarias que acarrean una importante baja laboral. La mujer podría ser sancionada con un año de prisión no efectiva y una multa mínima de 15.000 dólares, como consecuencia de haber “violado deliberadamente las normas de seguridad y causar lesiones que podrían impedir que alguien trabaje hasta por tres meses”.
La espectadora abandonó el lugar antes de que llegaran los agentes y lo único que se supo es que llevaba lentes de sol, un jean azul, una camiseta de rayas azules y rojas y una capa impermeable amarilla. Si bien los gendarmes pidieron toda la información que pueda conducir a su localización y arresto, aún no la encontraron.
La caída provocó heridas en varios ciclistas y los abandonos del alemán Jasha Sutterlin, el lituano Ignatas Konovalovas, el francés Cyril Lemoine y el español Marc Soler.