Salinas es el ministro mejor evaluado por los uruguayos, Heber el peor
En un panorama global donde prevalecen los saldos positivos de aprobación al igual que la gestión presidencial, las gestiones ministeriales también cumplieron el pasado 1º de setiembre la mitad del período correspondiente al actual ciclo de gobierno.
El ministro Daniel Salinas lidera con claridad tanto en términos de aprobación de gestión como de saldos de aprobación. Esta gestión es respaldada por un 56% poblacional, compuesto de un 18% que la califica como “muy buena” y un 38% que la califica como “buena”. Dado que un minoritario 17% desaprueba la labor sanitaria, esta gestión arriba a la mitad del período con una brecha de +39.
En un segundo nivel de aprobación aparece el MIDES, encabezado desde el mes mayo de 2021 por Martín Lema y el Ministerio de Defensa Nacional a cargo de Javier García. El Mides tiene niveles algo mayores de aprobación que el Ministerio de Defensa Nacional (49% – 44%), aunque la gestión de García cuenta con una brecha positiva de gestión algo más amplia que la del MIDES (+31 y +27 respectivamente).
Un tercer nivel de aprobación lo componen tres carteras cuyos guarismos y saldos de aprobación son similares a los del gobierno nacional (recuérdese que el gobierno cumplió su primera mitad del mandato con 41% de aprobación y una brecha positiva de +14). Estas carteras son el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social encabezado desde el comienzo del ciclo por Pablo Mieres (40% de aprobación y saldo de +17), el Ministerio de Economía y Finanzas liderado por Azucena Arbeleche (40% de aprobación y saldo de +14) y el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial conducido por la cabildante Irene Moreira (39% de aprobación y saldo +17).
Finalmente, el cuarto escalón de aprobación lo compone el Ministerio del Interior, encabezado por Luis Alberto Heber desde mayo de 2021, luego del fallecimiento de Jorge Larrañaga. De las siete carteras evaluadas, esta es la única con saldo neutro de aprobación, proveniente de un 36% tanto de aprobación como desaprobación. Estos guarismos están bastante alineados con la evaluación genérica que la población realiza actualmente sobre la gestión gubernamental en seguridad, confirmando la pérdida de imagen positiva a lo largo de 2022 y en el marco de un escenario de agravamiento de los indicadores de criminalidad, especialmente los homicidios.