«Nico» Rotundo fue nota en 2 de Punta
Nicolás Rotundo es uno de los símbolos más recientes de Peñarol, formó parte del quinquenio desde el año 1993 al 1997, se quedó en su primer pasaje hasta el 2003 y partió a España para jugar en Elche. Tuvo dos vueltas al carbonero, retornó a Europa para jugar en Real Oviedo, y además en Uruguay defendió a Liverpool. Su último club profesional fue Melgar de Perú, y el retiro definitivo se dio en OFI con la camiseta de Polancos de Nueva Palmira, además de haber vestido la camiseta albiceleste de la selección palmirense. En la mañana del miércoles charló en el programa «2 de Punta» de la plataforma «Otra Cabeza».
El ex volante central hizo referencia a sus últimos momentos como futbolista profesional, el pasaje por el fútbol del interior, y el después de retiro: «Se extraña jugar, siempre extraña el que estuvo en el fútbol, dejás y querés volver al otro día, eso no se pierde. Uno trata de seguir jugando de alguna forma, con los veteranos, con amigos o con alguien que te invite. Con una banda linda hicimos varios partidos a beneficio y eso te mantiene con actividad. A mi me gustaría con la edad que tengo entrenar todos los días y jugar todos los fines de semana, no lo puedo hacer por un tema laboral pero si pudiera lo haría. Pude disfrutar de jugar en Nueva Palmira con Polancos y la selección, disfruté en el fútbol del interior. La gente espectacular, se arrimaba el hincha de Peñarol a pedir alguna foto»
El nuevo estadio aurinegro fue motivo de charla: «Ojalá hubiéramos tenido la chance de jugar nosotros en el Campeón del Siglo, lo charlábamos y lo soñábamos mucho cuando jugábamos. En partidos de Copa Libertadores que salimos a jugar de visitante decíamos que haríamos destrozos con un estadio así, con la gente de Peñarol cerca, no era lo mismo el Centenario que es místico pero la gente está más lejos. Siempre le decíamos al Contador Damiani en broma que teníamos que tener un estadio, este superó todo, es impresionante, con algo más chico nosotros nos conformábamos. Estoy muy contento de que ex compañeros estén trabajando en el club».
Rotundo siempre disfrutó de entrenar y trata de transmitir esa pasión: «Me gusta ir a la cancha y ver a los jóvenes, siempre trato de contarles cosas que le pueden ir pasando por lo que uno vivió. Siempre el que juega más es como que entrena menos, muchos que jugaron conmigo la rompían y no llegaron. Siempre me gustó entrenar a morir, apostaba mucho a lo físico, yo sabía que el rival bajaba en algún momentos los brazos y ahí nos hacíamos fuertes . Si hacía la pretemporada a morir sabía que después me rendía, no me gustaba ver a un volante correr de área a área más que yo, me daba vergüenza».
En la actualidad trabaja en un grupo empresarial de representación de jugadores, que hace poco le permitió acompañar a Facundo Pellistri a Manchester: «Trabajo con el chino Lasalvia que es un amigo de muchos años, tratamos de estar en el día a día con el jugador, que no se sientan solos. Facundo Pellistri es un gurí crack, lo conozco desde sus doce años por intermedio del pato Aguilera que era su representante y amigo de la familia, siempre me dijo que era distinto. Se adaptó rápido a primera en un momento complicado de Peñarol, lo hizo con mucha responsabilidad a pesar de su juventud. Nunca fue goleador, siempre le hizo hacer goles a los demás. En el mano a mano su velocidad es impresionante, cuando se dio lo del Manchester United él no lo podía creer, estaba muy feliz con su familia. Está entrenando todos los días con los fenómenos y juega partidos con su categoría, Cavani se puso rápidamente a la orden, es un apoyo muy importante».