«Me venía a Artigas desesperado para estar con mi barra y mi familia»
En el marco de una semana especial, con presentación de un libro dedicado a su vida incluida, Carlos Bueno habló en la mañana de Otra Cabeza en la emisión de 2 de Punta. El ex delantero de Peñarol y la selección de Uruguay, de extenso pasaje internacional, hizo memoria y charló de sus comienzos, además de pensar en el futuro.
«Nosotros los del interior perdemos mucho lamentablemente cuando nos vamos a la capital, pero lo tenemos que hacer, en mi caso ir por lo que soñaste, buscar la oportunidad. Yo a mi madre le dije que no iba a estudiar porque sería jugador de fútbol y milico no quería ser. Al salir de tu pueblo te tenés que olvidar de muchas cosas, son diez años que tenés que meterle, para trabajar, estudiar medicina o lo que sea, es así. No fui un esclavo de lo que quería, lo disfruté, pero lo otro es real. Hoy me estoy dando cuenta que hay tiempo para todo en la vida. Jugué 22 años al fútbol, estuve en todos lados y extrañé muchísimo, siempre mis vacaciones fueron en Artigas. Me venía desesperado para estar con mi barra y mi familia. Hoy estoy disfrutando lo que no pude disfrutar antes. Quiero todavía jugar en la selección mayor de Artigas que es un sueño pendiente, entreno todos los días, siempre me gustó entrenarme».
«Los momentos que te llenan el corazón son lindos y más en estos tiempos complicados donde hay gente que está sufriendo bastante. Cada vez que ves a un amigo o familiar le tenés que demostrar el cariño, hay gente que por la distancia y las cosas que pasan no lo puede hacer. Esos momentos los tenés que aprovechar y disfrutar. Con el bola Lima hablaba todos los días, venía a la presentación de libro y unos días antes se nos fue de una manera que no pensás. Pasa rápido la vida, hoy mi hijo Nicolás va a cumplir 18 años y está más alto que yo, es igual en la forma de ser, tiene muchos amigos y yo comparto cosas con ellos. Les hago el asado, charlamos y tomamos alguna cerveza juntos. Lo miro y digo ojalá yo hubiese tenido un padre así. Uno hoy ve la vida de otra manera, soy feliz de ver a mis hijos y disfrutarlos todo el día».
«No me apresuro, quiero capacitarme de la mejor manera, estar preparado. Hoy nos recibimos y ya mañana queremos agarrar un equipo, me parece que es un error y no respetamos a otros entrenadores que se prepararon más tiempo y hoy están sin laburo. Hay que respetar un montón de cosas. Yo voy a prepararme de la mejor manera en todo sentido para cuando llegue el momento de poder trabajar, aunque después me vaya bien o mal. Hay que estar preparado también desde lo psicológico, la responsabilidad es totalmente diferente y quiero sentirme capaz de saber que hacer. Son muchas cosas, quiero prepararme para eso».