Deporte en San José: «Nadie puede creer que sigamos cerrados»
Prácticamente un mes y medio ha pasado desde que el Cecoed de San José decidió cerrar los espacios cerrados donde se practicaba cualquier tipo de deporte ya fuera colectivo o individual, afectando la posibilidad laboral de enorme cantidad de trabajadores, que a días del vencimiento del plazo de la medida se encuentran con la incertidumbre de saber si podrán retornar desde el próximo lunes 3 de mayo.
Promediando el mes de marzo y luego de la decisión tomada buena parte de los trabajadores se nuclearon y realizaron movilizaciones para intentar un retorno que no se pudo dar, fuero recibidos en su momento por la intendenta de San José Ana Bentaberry, y en la actualidad se encuentran nuevamente en contacto a la espera de resoluciones, en caso de que no se permita la reapertura no se se descartan nuevos movimientos.
Uno de los referentes del movimiento es Santiago Gadea, quien habló de la incertidumbre reinante en el sector: «Estamos a la espera de lo que se resuelva, no sabemos nada, muchos me preguntan que va a pasar con nosotros pero nada se nos ha informado. Sabemos que a nivel nacional es posible que en algunos lugares comience la actividad física, no tanto a nivel colectivo pero sí de repente en lo individual, pero depende del cecoed de cada departamento su se podrán abrir gimnasios y afines o no. Estamos preocupados porque aquí el cecoed se reúne los lunes, y ese día ya estarían vencidas las medidas, nos hubiese gustado saber antes, pero estamos esperando».
En otros puntos del país ya han novedades al respecto o al menos reuniones para tratar el tema: «En otros lugares del país sabemos que se está retomando la actividad, un ejemplo es Artigas donde ya se abrieron los gimnasios, en otros se están reuniendo en estos días. Nos gustaría que aquí pase lo antes posible, ojalá que antes del lunes, y que si deciden abrir que realicen los controles pertinentes para saber si se hacen las cosas como se deben, y aquellos que no cumplan con el protocolo si tienen que cerrar que cierren».
Van a superarse los 45 días sin poder trabajar para el sector, que insiste con el concepto de que el deporte es salud y no es foco de contagio: «Han sido tiempos muy duros, el acceso a las iniciativas de ayuda es muy engorroso y el valor no es tanto, entonces a veces se prefiere quedarse quieto y esperar. Las deudas están en varios casos, los retrasos, nos hubiese gustado que las facturas llegaran en cero. El dolor es que no paran de aparecer artículos a nivel nacional y en el extranjero que dicen que la actividad física ayuda con la no propagación del virus. Sin embargo nos siguen cerrando, duele por lo económico, y porque no nos dejan ayudar a la gente. El contacto con nuestro público es diario, nadie puede creer que sigamos cerrados, pero con la expectativa de que de una vez por todas nos dejen trabajar».