De Sudáfrica a Rusia, el camino más largo para realizar «a pie» supera los 20.000 kms
El camino más largo del mundo para caminar, es desde Ciudad del Cabo (Sudáfrica) hasta Magadán (Rusia), no hay necesidad de aviones o barcos ya que hay puentes. Son 22.387 Km y se necesitan 4.492 horas para recorrerlo, serían 187 días caminando sin parar, o 561 días caminando 8 horas al día. A lo largo de la ruta, se pasa por dieciseis países, seis zonas horarias y todas las estaciones del año.
4.492 horas. Ese es el tiempo que, tal y como desveló Interesting Engineering, separa ambos puntos. Si fuera posible caminar sin parar y sin dormir, un humano tardaría más de seis meses en completar el recorrido. Entre la ciudad siberiana de Magadan y la africana de Ciudad del Cabo, en el Cabo de Buena Esperanza, hay 16 países que habría que cruzar en la aventura que representaría dicho viaje. De sur a norte, la expedición partiría de Sudáfrica, pasaría por Botswana, Zimbabue, Mozambique, Malawi, República Democrática del Congo, Sudán del Sur, Sudán y Egipto antes de penetrar en Asia por la península del Sinaí a través del Canal de Suez para topar, después, con Israel, Siria, las partes asiáticas de Turquía y Georgia, Kazajstán, Mongolia y, por fin, la ansiada Rusia. En jornadas de seis a ocho horas, se calcula que una persona tardaría 1.153 días en llevar a cabo la ruta.
Pero la inabastable caminata no es la única dificultad que entraña el recorrido. Para completarlo, el aventurero tendría que enfrentarse a tramos en los que, entre otros peligros concernientes a la naturaleza —tales como animales peligrosos, espesas selvas y llanuras eternas— le sería difícil la supervivencia. Hasta cuatro de los 16 países se encontraban en 2020 en guerra. Desde Sudán del Sur, el país más joven del mundo, hasta Siria, donde el conflicto, activo desde el 2011, se ha cobrado ya la vida de 380.000 personas; pasando por el Sahel (que comprende Sudán, uno de los países que habría que cruzar) e Israel, donde la lucha con Palestina parece no tener fin. Todo eso, sin contar las numerosas bandas armadas y grupos terroristas que siembran el miedo en las distintas regiones, algunas de ellas, entre las más empobrecidas del planeta.
Para no fracasar en el intento, habría que tener la posibilidad de invertir más de tres años de la vida de uno en la expedición.