1000 investigadores uruguayos unidos por recortes a la ciencia
«Le decimos al gobierno no que apoye a la ciencia sino que se apoye en la ciencia, pero para eso se precisan recursos», sostuvo el gerente de investigación del INIA, José Paruelo. En febrero la Agencia Nacional de Investigación e Innovación recibió un programa de recortes que alcanzó un 43 % en investigación, un 30 % en formación de investigadores y un 51 % en acceso a la literatura científica. El recorte total superaba los 15 millones de dólares. El Ministerio de Educación y Cultura revisó las cifras, pero solo compensó el 12 % de la quita.
Para evaluar esta situación, este miércoles 17 se desarrolló en forma virtual una asamblea de investigadores que convocó a 1.000 participantes. En entrevista con Mejor Hablar, el gerente de Investigación del INIA (Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria), José Paruelo, se refirió a las temáticas abordadas en la reunión.
Paruelo puntualizó que el Gobierno «tocó de manera muy fuerte el presupuesto de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII). Sostuvo que ello impactará en las capacidades del país, dado que la reasignación de fondos compensatoria de algo más de 1,6 millones de dólares es completamente insuficiente. «No impactan sobre la cantidad de becas ni sobre los instrumentos de financiación centrales, que son los fondos Clemente Estable y María Viñas», aseguró.
Los científicos coincidieron en la necesidad de convencer al Gobierno sobre la necesidad de concretar aumentos presupuestales significativos en relación a 2019. A juicio de Paruelo las políticas públicas sobre el desarrollo de la ciencia y la tecnología deben ser una política de Estado y de largo plazo. En ese sentido, recordó que gobiernos liberales como Alemania o la Cuba socialista dedican recursos a la ciencia y ahí resuelven sus problemas. «La pandemia dejó claro es que hay países que pueden desarrollar vacunas o kit de diagnóstico y otros que no», acotó.
El entrevistado indicó que la cantidad de investigadores en el país en relación a la población activa es extraordinariamente baja. A modo de ejemplo señaló que en Uruguay hay un tercio menos investigadores que en Argentina. «No ocurre en ningún país del mundo que los proyectos más riesgosos no sean financiados por el Estado», acotó. Por otra parte, Paruelo señaló que desde la comunidad científica hay una voluntad de diálogo. «Nos preocupa la baja financiación de la ciencia cuando el gobierno se está apoyando mucho en ella», subrayó. Seguidamente añadió: «Cuando se recorta el presupuesto de la ANII se reduce la formación de nuevos investigadores»
«Le decimos al gobierno no que apoye a la ciencia sino que se apoye en la ciencia, pero para eso se precisan recursos», sentenció gerente de investigación del INIA.