Diego Zabala: «Racing es mi casa, aprendí a ser humilde y a valorar las cosas»
Diego Zabala actualmente es jugador de Rosario Central, hace varias temporadas es parte de la primera división argentina, antes pasó por Vélez Sarfield y Unión de Santa Fe. Antes hizo formativas en Racing de Montevideo, club en el que debutó en primera división, y donde estuvo varios años en el plantel principal.
Hubo tiempo en la charla dedicado a hablar del club de que surgió en Sayago: «Llegué a los doce años a Racing desde la escuelita de Defensor Sporting, hasta llegar a cuarta jugaba poco, no había pegado el estirón, me quedaba muy grande la cancha. Con el tiempo me doy cuenta que en séptima había buenos jugadores de mucho nivel y está bien que no jugara mucho, más adelante agarré el nivel futbolístico y rápidamente pasé a primera. Mi miedo era que me dejaran libre y tener que ir a buscar otro equipo, aunque no me convocaran siempre entrenaba y alentaba a mis compañeros, esa constancia dio sus frutos. Debuté en primera con Edgardo Arias, me quería poner en el Clausura 2010 pero no había plata para hacerme contrato y me puso en el Apertura 2011. En primera también me tocó no jugar pero siempre seguí adelante. Racing es mi casa, siempre lo digo, aprendí a ser humilde y a valorar las cosas. La patada más grande me la pegó Colman en un Racing – Miramar Misiones, me mató».
Su primera salida a Argentina fue al equipo de la V: «Vélez es un lindo club, me costó el paso de venir de Racing en Uruguay, la adaptación me costó unos meses desde lo físico. Era mucho el ritmo y la intensidad, después me tocó hacer algunos goles cuando el equipo venía mal y me gané el cariño de la gente. No me pude quedar porque el club no estaba para invertir y no podía hacer otro préstamo, la villa olímpica donde se entrena es una locura, el club me dio la chance de llegar a un fútbol muy competitivo. Todos recuerdan en el club la época de Bianchi donde fueron campeones del mundo, muchos jugadores de esa época trabajan en el club y otros van de visita, a la salida de cada práctica había 15 o 20 periodistas».
Posteriormente salió a Unión de Santa Fe, y actualmente defiende los colores de Rosario Central: «Los clásicos Unión – Colón, y Central – Newell’s, los jugué solo con público local, con visitantes estaría bueno, acá es mucha la pasión y el fanatismo. Será difícil porque muchas veces hasta hay peleas entre los propios barras del mismo equipo, la previa de un clásico se vive mucho en la calle, al llegar a la ciudad lo primero que te dicen es que hay que ganarlo. No les importa más nada, les interesa más ganar el clásico que ganar un título. Jugué de local el clásico de Rosario y es terrible, la hinchada de Central sacó la bandera que rodea todo el estadio y es increíble, una locura. Hay mucha presión en este club, es un examen cada partido. Cristian González es muy intenso, es su primera experiencia como entrenador y quiere que los equipos sostengan el nivel. Lo vive como hincha, le sale de adentro, quiere lo mejor para Central. No miro mucho a la prensa, en alguna oportunidad miro lo que opinan los hinchas, igual nunca le podés gustar a todos porque son miles, uno sabe cuándo juega bien o mal».